miércoles, 30 de marzo de 2011

6.- 1er ejemplo. El día de la bestia.

Planteadas algunas ideas generales (la cultura como construcción simbólica, las características del análisis y la importancia de los clásicos en la cultura) podemos ir concretando con un ejemplo...

Un ejemplo de la presencia de los clásicos en la cultura contemporánea podría ser la película española de "El día de la bestia" de Alex de la Iglesia (1995). Claro que, para poder analizar cualquier mensaje es necesario primero leerlo -escucharlo, verlo, etc.- completo; así que...

Ahora, pa´que no digan, dejamos un video que va más o menos acercándonos a la película -igual conviene checar las 3 partes de la entrevista-:



Suponiendo ya revisada la película, lo siguiente podría ser su desglose a la manera de Jakobson y sus funciones:

F. Emotiva (Sobre las intenciones del autor para construir su mensaje):
Alex de la Iglesia (65) licenciado en filosofía y empapado de la "cultura popular", señala en una entrevista que, teniendo presente que todo producto cultural parte de una intención (pues, como ya habíamos señalado, no son un producto natural), se vale del lenguaje cinematográfico precisamente para eso: para mostrar su postura frente al momento histórico en el que se halla. La ventaja -creo- que presenta su trabajo -y ésta película en particular- es que, además de no caer en lo panfletario, hace uso de una elemento que exige mucha inteligencia: el humor.

F. Fática (Sobre el contacto con dicho mensaje):
Damos por supuesto que la vimos completa, sin ruidos externos (que se fue la luz, que se durmieron, etc.)...

F. Referencial (Lo qué dice concretamente):
Luego de estudiar por más de 25 años el Apocalipsis de San Juan, el cura (y profesor de teología) Ángel Berriartúa ha descifrado un mensaje: el nacimiento del anticristo el 25 de diciembre en Madrid, lo que lo lleva a iniciar una carrera al mal para evitar dicho evento. En su camino se hará de la ayuda de José María (fanático del Heavy metal) y Cavan (personaje de televisión mezcla de medium y místico)...
Obviamente, la idea entonces es desarrollar aquí una síntesis de lo que presenta el mensaje o fenómeno a revisar.


F. Metalingüística (Cómo está construido):
Entre otras, la película destaca a Madrid prácticamente como un personaje: su arquitectura adquiere valores simbólicos que nutren la historia -el jardín del ángel caído de la escena final, las torres Kio como símbolo del mal, etc.) y, al mismo tiempo, presentar una historia "satánica" que ocurre en temporada navideña carga a la historia de un sentido irónico que vuelve muy ambiguo considerarla dentro del mero género de terror... También presenta una estructura circular (casi al iniciar, la llegada del cura a Madrid es al lugar donde nacerá el anticristo)... Y así, es posible desarrollar seguir desarrollando más elementos que enriquecen el trabajo.

F. Poética (Las implicaciones autor-mensaje-receptor en un contexto -entiendo- más amplio):
La película presenta, de manera velada, un clásico: "Don Quijote de Mancha" de Cervantes con la intención (de alguna manera) de denunciar un problema por el que pasaba (o sigue pasando, no lo sé) en ese momento: la agresión a las minorías -tipo migrantes o indigentes-. Si el Quijote representa una crítica al pensamiento burgués de su momento, "El día de la bestia" se entiende como una reelaboración igualmente comprometida -en sentido político-estético-.

F. Connotativa (Sobre su recepción) :
En su momento, "El día de la bestia" fue un enorme éxito de crítica y público; se llevó 6 premios Goya -mejor director, mejor guión, efectos especiales, etc.), galardonada en los festivales de Géradmar y Bruselas... (Así, además de lo que uno termine pensando sobre el producto revisado, conviene revisar cómo fue recibido a nivel social).

Hasta aquí, podemos decir que el análisis cumple con lo básico: el desglose del fenómeno -entendido como mensaje-, pero podríamos ampliarlo a su sentido crítico y, sobre todo, sustentarlo con fuentes bibliográficas, pero eso podemos dejarlo para la siguiente ocasión, saludos...

jueves, 24 de marzo de 2011

5.- Los clásicos.

Ya con una idea general de lo que puede entenderse por un análisis, su distinción del comentario y su evidente ganancia a partir de nutrirlo con la crítica, aparece otra pregunta:

¿Qué investigar? o más precisamente ¿de dónde partir?

Y aquí viene Jeffrey Alexander (acompañado por Anthony Giddens) -con su texto "La centralidad de los clásicos" a ayudarnos... Obviamente, visto desde mi perspectiva.

Primero, conviene separar a las ciencias naturales -de carácter más empírico- de las sociales, marcadas por una posible lectura humanista y un recorrido histórico que en su complejidad obliga a recurrir, para su análisis, a los llamados

CLÁSICOS

los cuales podemos considerar productos culturales a los que se les concede un rango privilegiado dentro de una disciplina o actividad social concreta y que sus contemporáneos consideran necesario conocer sin requerir necesariamente a demostrar su valor. Su utilidad resulta , además de significar rupturas epistemológicas, de señalar puntos de partida a partir de los cuales acercarse a un aspecto de nuestro entorno (por ejemplo, la política, la comunicación, la estética, etc.), es decir, permiten ubicar aquellos aspectos que se ven como problemáticos.

Otra vez, es importante entender a los clásicos inmersos en los distintos campos sociales y estos a su vez enmarcados por procesos históricos, donde la Historia no resulta algo acumulativo que da como resultado que la posible importancia de una obra clásica resulte, de manera "natural" rebasada en el presente: al partir de la experiencia de los sujetos (en la que no es posible llegar a consensos definitivos), la Historia se vuelve el campo de los razonamientos que llevan a discursos, y no de las explicaciones definitivas, lo que no permite dar por superado a las obras clásicas.

Así, es posible señalar algunas ventajas del trabajar a partir de los clásicos:
  • Facilitan la discusión teórica. Pues, como ya se dijo, reconocer su importancia sin tener que justificarla en todo momento.
  • Su existencia impide un discurso general dominante. Dado el carácter ideológico de todo discurso, resulta obvia la necesidad de cuestionarlos.
  • Permiten acuerdos o bases mínimas para una relación cultural. Estimulan puntos comunes a partir de los cuales reconocer o interpretar problemáticas.
  • Legitiman escuelas o corrientes de pensamiento. Al reconocerse dichos puntos de partida, su tendencia general queda más claramente identificada.

Otra, un poco más irónica, es que también implican -en los contemporáneos- la necesidad de superarlos.

Por último, hay que considerar que con los clásicos -como con todo nuestro entorno- se parte de relaciones empáticas y estéticas que facilitan -o no- su interpretación. Entonces, lo ideal sería disfrutar a los clásicos sin un afán erudito y desde lo que Husserl llamaba una "actitud ingenua", desprejuiciada a partir de la cual reconocer su aportación cultural, lo que no es poca cosa.

Que conste que todavia no hablamos de semiótica pero supongo que esto sirve de marco general.

Saludos.

martes, 22 de marzo de 2011

4.- El pensamiento crítico.

Si partimos de que el análisis se distingue del mero comentario por estar sustentado teóricamente, es porque ésta busca integrar -de manera más o menos integral- los diferentes campos de la realidad con la intención -generalmente- de obtener un resultado útil.

Así, la teoría debe presentarse de tal forma que las esferas sociales se relacionen sin presentar una relación problemática.

Cuando esto no es así -lo que es la constante-, la teoría se entiende como ideología: el mundo se entinde entonces como una visión concreta del mundo que indica qué -o qué no- resulta valioso a la sociedad.

El problema entonces es la sociedad misma, pues su propia dinámica le permite generar diferentes respuestas, es decir, siempre es posible generar nuevas hipótesis sobre las relaciones sociales y sus conflictos. La sociedad hace evidente que la Historia no es algo "natural" sino que es resultado de una dinámica.

Aquí aparece un elemento importante: el pensamiento crítico que, si bien no siempre se visualiza como algo necesario, obliga a replantear las relaciones -y dinámica- entre el entorno y la acción social.

El pensamiento crítico parte entonces de la necesidad -y libertad- del sujeto por interpretar las diferencias presentes en toda realidad social; de hecho, presenta un valor básico que lo conecta con la fantasía: al permitirse replantear la condición presente de la sociedad, es capaz de generar una imagen futura de dicha sociedad y donde la utopía aparece como su forma más acabada.

Con esto, el pensamiento crítico se separa de la realidad -haciendo de ella una abstracción a partir de la cual abrirse a otras formas de visualizar la realidad- y se conecta con ella en lo concreto, en lo social.

Entonces, si por teoría entendemos cierta capacidad para visualizar -el entorno por ejemplo-, es el pensamiento crítico el que permite distanciarse de dicho entorno y enriquecerlo a partir de otras interpretaciones.

Aquí la lectura podría ser del libro "Teoría crítica" de Max Horkheimer el ensayo "Teoría tradicional y teoría crítica".

Saludos....

viernes, 18 de marzo de 2011

3. El análisis

Sumemos a la idea del animal simbólico otro aspecto:

¿Qué podemos entender por un análisis?

y, más concretamente

¿por un análisis semiótico?


En términos generales, éste se puede entender como la descomposición de un fenómeno en sus diferentes partes con la intención de entender sus interrelaciones y lógica interna.

Esto obliga a distinguir el análisis del mero comentario personal: si bien se parte de la opinión personal, sustentarlo en un método le da una coherencia más sólida ¿no?

Ahora, si tomamos el modelo clásico de comunicación:
  • Referente - Mensaje - Receptor
queda claro que todo análisis del proceso comunicativo debería comprender las relaciones de estos 3 elementos. Pero la comunicación rebasa esta relación primaria.

Un modelo que, creo, hace más amable la revisión de dicho modelo es el propuesto por


quien señala que, para que este proceso funcione, es necesario observar cómo se desarrollan las siguientes funciones -6-:

a) Emotiva. Comprende al emisor y las posibles intenciones para difundir su mensaje;
conviene ubicar su estilo como un elemento fundamental en la elaboración del mismo.

b) Referencial. Se refiere al mensaje mismo. El nivel concreto de la información, más allá de
interpretaciones o suposiciones.

c) Fática. Refiere al contacto con el mensaje. La pregunta sería ¿Llegó completo el mensaje?
Claro que si no llega completo el mensaje -lectura, película, etc.- por la causa que sea, la calidad del análisis queda muy empobrecida.

d) Metalingüística. Al componerse de diversos lenguajes, es posible desglosarlos para comprender la riqueza de la construcción del mensaje.

e) Poética. Al permitir la ambiguedad en el mensaje, se vuelve una de las más complejas pues
obliga a desglosar su estructura (implicando con esto al emisor -y al receptor-).

f) Connotativa. Alude al receptor y, más concretamente, su repsuesta ante el mensaje. Supongo que en el caso de los mensajes masivos, es posible contrastar nuestra respuesta a una más amplia.

Con esto se marca la complejidad de los procesos sociales -entendidos como fenómenos de comunicación-

Para que quede mejor entendido esto, yo recomendaría la lectura del ensayo "La estructura
del mal gusto" del libro "Apocalípticos e integrados en la cultura de masas" de Umberto Eco. Además de ser -como Jakobson- bastante amable en su descripción, Eco proporciona ejemplos que, desde el campo de la estética, dejan ver la complejidad de estos procesos.

Pero, por hoy ya es más que suficiente...

Saludos

viernes, 11 de marzo de 2011

2. Siguiendo con el contexto.

Hasta donde recuerdo, quien me dejó más clara la relación del sujeto y los símbolos -sin ser semiótico- fue


Para él, si bien lo que distingue al sujeto no es tanto una naturaleza (o metafísica) definitiva sino sus obras, son sus cuestionamientos filosóficos los que le permiten su conocerse a sí mismo. Al mismo tiempo, deben considerarse los siguientes aspectos:

  • El símbolo como el mediador entre el sujeto y la naturaleza.
  • La posibilidad de partir del escepticismo para desarrollar un pensamiento crítico.
  • La interrelación individuo-sociedad.

Es a partir de un entendimiento crítico que el sujeto es capaz de distinguir entre una realidad y una posibilidad a partir de la cual valorar sus sistemas de pensamiento. A grandes rasgos, los signos más evidentes señalados por Cassirer son:


El lenguaje. Es uno de los simbolos que mejor permite concretar la experiencia en términos de tiempo y espacio.

El tiempo. Que actúa a nivel perceptivo, establece un orden y una memoria (volviendo al futuro una tarea ética)

El mito. Cargado de un fuerte valor emotivo, busca aceptar la "realidad" tal cual.

La religión. Con la que el sujeto abandona su soledad -y al mismo tiempo su independencia-, acepta su imperfección.

La ciencia. Entendida como un lenguaje con el que se busca establecer una nueva lógica.

El arte. Uno de los signos que mejor sintetiza la complejidad humana; en su búsqueda inicial por acercarse a la naturaleza, permite al sujeto descubrir su propio interior generándole (además) un placer.

Obviamente, nada sustituye la lectura directa del autor, pero como introducción supongo que con eso puede dejarse de momento ¿no?

lunes, 7 de marzo de 2011

1. Un poco de contexto.

Primero, una introducción general que se abre con una pregunta:

¿Qué es la cultura?

En términos generales, podríamos decir que:

  • Todo fenómeno cultural se reconoce por ser distinto de los naturales.
  • Que puede describirse como la forma común y aprendida de la vida que comparten los miembros de una sociedad y que consta de la totalidad de la totalidad de los instrumentos, instituciones, valores y creencias que comparten.

Obviamente, es posible acercarse a la cultura a partir de diferentes vías: la antropología, la filosofía, la sociología, etc.

Así, la noción de cultura implica la consideración de lo siguientes aspectos:

a) La cultura individual.
b) La cultura de un grupo o clase.
c) La cultura de una sociedad.

Esto abre diversos niveles de análisis: la apropiación desigual de la cultura, los procesos de mestizaje, los conflictos frente a la cultura oficial, etc.

Para la antropología -George Foster-, la cultura implica:

1) La posibilidad de ser aprendida.

2) Presentarse de manera integrada, es decir, no son costumbres relacionadas "accidentalmente".

3) Ser dinámica.

4) Integrar un conjunto organizado de valores que le dan estabilidad.

5) Posibilitar la acción recíproca.

Faltaría entonces empezar a acercarnos a una primera conclusión: la cultura puede entenderse como un simbolo que abre paso al ser humano como un animal simbólico. ¿Será?...

martes, 1 de marzo de 2011

0.- ¿Introducción?

Luego de una experiencia de años con la materia "Teoría de la comunicación III" -y sus modelos semióticos- en la UIC -Universidad Intercontinental- y de sus respectivas generaciones de aprobados y reprobados, vamos a probar suerte con este proyecto, mismo que obedece a otra materia en otra escuela -Universidad de la Comunicación-...

La idea de este espacio es entonces desarrollar, a lo largo de las siguientes 13 semanas- los temas del curso de semiótica tal como se manejaron en clase. Los temas se desarrollarán a razón de 2 a 3 entradas por semana y su orden a sería el siguiente:

a) Introducción. Cultura, principios generales y campo semiótico.
b) La escuela europea: La semiología
c) La escuela americana: La semiótica
d) La crítica al modelo semiótico.

Entiendo que todo apunta a que este no será el blog más divertido pero lo justifico a partir de que son los temas que creo haber llevado a buen término dicho curso y -espero- deje más claro cómo podría resolverse un trabajo de investigación a partir de una metodología concreta: la semiótica.

Gracias
Aarón