domingo, 27 de noviembre de 2011

31.- Cultura digital -I-

El meollo de la cuestión es el siguiente: para nosotros la realidad es el mundo y para las máquinas lo único verdaderamente real es la lengua... La comicidad no intencional nace como consecuencia de la coligación de unas categorías que creíamos separadas definitivamente, donde las máquinas empiezan a "desenmascarar" nuestra lengua, descubriendo en ella giros idiomáticos resultantes de la composición corporal del hombre.
Stanislaw Lem. Magnitud Imaginaria

Looking for another place
Somewhere else to be
looking for another chance
to ride into the sun

Where everything seems so pretty
When you´re lonely and tired of the city
Remember, its a flower made out of the clay to the city

Velvet Underground Ride into the sun


La idea de hacer este blog fue durante la clase Seminario de Nuevas Tecnologías, así que justo es retomar uno de sus temas básicos: la cultura digital. Básicamente retomo textos de Manuel Castells y otros sociólogos sobre los procesos de interacción social y los cambios de esta revolución tecnológica.

Uno de los aspectos centrales es la disolución entre lo real -entendido como lo actual- y lo virtual -como posibilidad- permitiendo así cuestionar conceptos tradicionales como estabilidad o delimitación, y obligando -en principio- a replantear nociones como el tiempo o la muerte, conformadas por una lógica propia. Una metáfora de esto -otra vez desde un lenguaje menor-:



Otra vez: si el análisis de la interacción social parte de lo cotidiano como elemento palpable de la "realidad", es en el lenguaje donde se sintetizan las prácticas -nuevas o no- como formas de interpretación entre individuo-grupo-instituciones-sociedad.

En la cultura digital, la sociedad red obliga a pensar en cierta disolución de lo local/global, y en una comunicación cuyo marco de referencia es la pantalla, pero sobre todo en nuevas vías de acercamiento al entorno vinculadas a:
  • Una lógica organizada a partir de protocolos codificados y respuestas predeterminadas llevada a la convergencia de distintos formatos tradicionales -imagen, sonido y texto- de manera casi infinita, lo que impide jerarquizar una calidad sobre otra.
  • Una nueva naturaleza de la experiencia, que permite reelaborar -y oscurecer- la historia -individual o social-, cierta fragmentación de los espacios de poder tradicional y un mayor desarrollo -y fragilidad- de los grupos y actores sociales.

Así, si todo grupo social resulta -por definición- integrado por desiguales suceptibles de alcanzar algún reconocimiento político, en lo digital esto se multiplica y a la organización mediocre corresponde el fortalecimiento de instituciones que, en lo interno o lo externo, no hace sino mantener un orden social y sus desigualdades, a nivel micro o macro .

Dicho cambio tecnológico permite rebasar algunos conceptos culturales tradicionales como:

  • R A Z A.
Una noción básica de la diferenciación y el racismo; resulta fragmentada para dar paso a movimientos clasemedieros -por ejemplo, los medioambientalistas- que procuran cierta sobrevivencia colectiva o bien, en el otro extremo, dar paso a grupos delincuenciales.
  • N A C I Ó N.
En este concepto entran aquellas comunidades tradicionalmente construidas en la memoria colectiva al compartir una Historia que vincula pasado y futuro con el presente, un proyecto político más o menos común, etc. Pero, si históricamente la idea de nación surge "de abajo arriba" (pues sus integrantes comparten atributos como el lenguaje, el territorio o la religión, en lo digital:
  1. La crítica al Estado-Nación se hace más sólida.
  2. La cultura multiplica sus vías de acceso debilitando las instituciones políticas locales.
Con esto, el antiguo nacionalismo que llevó a la construcción de un Estado -y su economía de mercado- se fragmenta y divide en diferentes grupos que reaccionan -ya no tanto en lo político como en lo cultural- ante las elites.

Pero una de las nociones que presenta los cambios más significativos sería el de:

  • I D E N T I D A D
En principio, se entiende como la fuente del sentido y la experiencia del individuo marcada, además de lo biológico por atributos culturales como la historia y la geografía, pero en lo digital ésta puede ser construida, presentando así un principio de resistencia a lo comunal, y dando paso a 3 modelos de identidad:
  • Legitimadora: Introducida por las instituciones dominantes para extender y racionalizar su dominio sobre los actores sociales. Generan la sociedad civil y sus aparatos.


  • De resistencia. generada por los actores devaluados en la lógica social de dominación, son comunidades de resistencia colectiva y, en sus extremos, se ubican los fundamentalismos religiosos, el orgullo nacionalista y la autodenigración.


En su extremo, dedicado a reforzar la identidad y alejar a los otros -a partir de una referencia trascendente-, dicha identidad supera la noción de Estado -el Islam somete a la religión- para ubicar en todo sujeto un principio de sumisión y un objetivo: la lucha contra todo aquel que no observe las leyes sagradas.

La pregunta de Castells es: ¿Por qué, ante un evidente avance tecnológico se presenta dicho fenómeno? Lo que sugiere es que, ante el fracaso de un Edo-nación y una modernización económica evidente, aparece también una lógica nacionalista de exclusión independiente al Estado donde la única forma que tendría el individuo de afirmarse -y salvarse- sería a partir de la violencia y el sacrificio.
  • Proyecto. Cuando dichos actores se basan en materiales culturales para redefinir su posición en la sociedad. Ya sabemos facebook y redes sociales que le acompañan.

Así, la cultura vuelve a ser el atributo a partir del cual definir la identidad: si uno de los prejuicios más fuertes sobre lo digital supone que fragmenta los lazos sociales, la realidad es que lo bueno -o lo malo- sólo se potencializa. Y si la identidad ha resultado tradicionalmente normatizada por las instituciones, lo digital también permite cierta resistencia comunal y autorreflexiva. Como siempre, lo que define a este entorno no es su uso cuantitativo sino
el modo de dichas apropiaciones.

Así, si entre las industrias que mayores cambios sufrieron por este proceso están la editorial, la musical, la pornográfica, la de videojuegos y la radio, estimula saber que una de sus consecuencias sea la posibilidad de contenidos de mayor calidad -y lo dice alguien que se chutó, a falta de algo mejor, la televisión del Tío Gamboín, Mana y demás pendejadas- aún a sabiendas de que por ese camino no se llega muy lejos.

Sólo queda entonces agradecer la posibilidad -esta si más cierta- de acceder a trabajos como:



Saludos...

Bibliografía
Manuel Castells. La Galaxia Internet
Manuel Castells. La sociedad red.

2 comentarios:

  1. También resulta, a exceso de ejemplos en una cantidad de movimientos culturales y políticos tan repentinos como numerosos. Las características iterativas del internet se han calcado en el carácter de las personas, que ya se desdibujan tal como su identidad, y se contienen a sí mismos en un: ya viste? ya leíste? ya escuchaste?, y así mismo parece que nada es, sino hasta que logra un mínimo de views en un portal.
    El asunto puede parecer inocuo, pero a la larga, todo apunta a un futuro como se revisa en la película de "el demoledor" de Silvester y Sandra B. Mientras ella conduce, el éxito que suena en la radio es un gingle.
    Nadie está revisando los contenidos, y en verdad que la mayoría son en exceso malos.

    Saludos Profesor.

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  2. Hola Hugo:

    ¿Y pa´ qué nos amargamos? Con todo, no queda sino agradecer estar en un momento donde la información está para el que quiera buscarla... Ya si algunos se creen las calenturas más inmediatas publicitadas pues allá ellos y su estomago...

    Por cierto, gracias por comentar y, dado que una de mis clases terminó de manera bastante mediocre, voy a empezar a escribir esos temas y ponerlos por acá... Un poco para compensarles a los chavos que aguantaron el cursillo -je- y otro poco pa darle salida al material que me he encontrado...

    Saludos

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