domingo, 21 de agosto de 2011

25.- Fassbinder: Berlín Alexanderplatz.


Es segadora, se llama Muerte, tiene la fuerza de Dios que es fuerte. Ya no vacila, su arma afila.
La muerte ha empezado su lenta, lenta canción. La canta como un tartamudo, repite cada palabra; cuando ha cantado un verso repite el primero y empieza otra vez. Canta como se mueve una sierra. Empieza muy lentamente, penetra luego profundamente en la carne, chirría más fuerte, más agudo y más alto, y luego termina con una mota y descansa. Después se retira lenta, lentamente y rechina, y su tono se hace más alto, y más firme y chirría y penetra en la carne.
Lentamente canta la muerte.
Alfred Döblin. Berlín Alexanderplatz

Amar es dar algo que no tenemos a alguien que no lo ha pedido
Jaques Lacan

Porque, ESTOY SEGURO, que tanto a Döblin como a Fassbinder les hubiera gustado... Lo malo es que todos los videos eran MUY cursis así que, ni modo, tendremos que ponerlo "en vivo":



¿Por qué Fassbinder? Nada más porque, más allá de lo complejo de su vida -37 años y más de 40 películas algo dice ¿no?-, de la admiración hacia él por gente como Waters, su sensibilidad y capacidad para abordar estilos, su manejo impresionante de recursos -ya sea a nivel de austeridad o de grandes producciones- y por hacer evidente la importancia de la imagen como reflejo de una historia social. Su trabajo refleja, a nivel estético, la complejidad de la cultura actual y podría abordarse tranquilamente desde distintos acercamientos teóricos. -las minorías y la construcción de la identidad, la reelaboración del lenguaje, etc.-. Para Yann Lardeu:

Nagisa Oshima, Pier Paolo Pasolini y Rainer Werner Fassbinder proceden de países que han engendrado el fascismo y han perdido la guerra. Los tres son cineastas de la no reconciliación, del rechazo del olvido.... Los tres han visto, en el hipócrita silenciamiento del pasado, el fracaso de la democracia venidera... Los tres son cineastas del deseo, a la vez como pulsión, como energía y como determinación. Los tres han visto en el deseo un doble límite a la sociedad, a la vez como expresión radical de la subjetividad y como violencia natural... como potencia aniquiladora que ésta ha de reprimir para poderse desarrollar.

En su trabajo, Fassbinder hace evidentes 2 constantes:

  • Un esfuerzo deliberado por interrogar no sólo los códigos cinematográficos.
Sin abordar directamente los temas políticos, sus películas resultan políticas en la medida en que se dirigen hacia una subversión que tiende a hacer explotar los códigos nostálgicos del relato hollywoodense.
  • En su obra, ninguno de los protagonistas se da cuenta de que todo pensamiento, deseo o sueño proviene directamente de la realidad social o ha sido manipulado por ella.
Las acciones de sus personajes no son resultado del libre albedrío, sino como la expresión de un estado histórico en el que los personajes no son más que peones que ponen en evidencia el problema de la no-comunicación en términos de clase.


El cine de Fassbinder se liga tradicionalmente a personajes marginados: mujeres, homosexuales, inmigrantes, ex presidiarios, etc. aquellos que son obligados a vivir en conflicto con las normas sociales. Sin embargo, y contra toda idealización, si bien su trabajo privilegia al individuo por encima del grupo, no favorece a un grupo específico: así sean marginados, siempre es posible encontrar entre éstos recursos para destruir al más débil.

Lejos de dramatizarlos, los personajes sirven como figuras para cuestionar los valores tradicionales, sean o no de las minorías y lo que vemos es la disolución de personajes cuya muerte biológica no hace sino ratificar una muerte social dictada de antemano, como un sacrificio en aras de la seguridad de los demás.



Si tradicionalmente el público busca reconocerse en la imagen burda promovida para dirigir un sentimiento de compasión, Fassbinder opone un espectro que cuestiona el proceso de odio y destrucción de aquel otro al que, si no se le elimina físicamente, se le extermina en la memoria.

Cuando yo era pequeño, si nos encontrábamos a algún judío me decían: es judío, pórtate bien y sé amable... En mi opinión, mantener este tabú no es proteger a los judíos, sino prolongar una discriminación. Es lógico que un tabú acabe convirtiéndose en su contrario. Si no se puede hablar de ellos, quiere decir que tarde o temprano acabarán de nuevo por pagar el pato por algo.

Ejemplo de esto: la lectura de un poema de Goethe sobre un fondo con vacas abiertas en canal:



Si le creemos a Pierre Bordieu y entendemos la cultura como el espacio donde la relación dominantes-dominados toma al sujeto como la victima ideal de una violencia simbólica que favorece el orden social -y las figuras tradicionalmente atacadas son la mujer y el homosexual-, la pregunta que queda es ¿Qué nos obliga a participar en dichos procesos?

Para Bordieu la respuesta es simple: si somos los mismos individuos los que cooperamos en la construcción de la realidad -y con ello justificamos nuestra realidad-, la violencia simbólica se ejerce con la anuencia del individuo, que ha sido educado para ello en su búsqueda del ser reconocido. Dicha violencia se perpetúa a través de la lógica de estos mecanismos:
  • Los campus, es decir los espacios sociales aparentemente naturales donde se presenta un capital común -como el prestigio, el dinero, el gusto- por el que se entra en conflicto y en el que, obviamente, se ejerce una violencia simbólica.
  • Los habitus, es decir, los modos de interpretar y ver la realidad. Son las formas en que el individuo desarrolla sus estrategias para apoderarse de dicho capital simbólico y en el que, de manera velada, se incorporan las estructuras sociales.
Si esta dinámica de violencia simbólica se presenta sin excepción, la pregunta de Bourdieu es:

¿Es el amor la única excepción a la ley de la dominación o, por el contrario, es la forma más sutil y acabada de violencia simbólica?

Siendo idealistas, el amor supondría la suspensión de las relaciones de fuerza -más que en la amistad-, la plena reciprocidad y el rompimiento de todas las formas de intercambios y mercados culturales: es la entrega del uno mismo y lo que tengamos de sagrado con la intención de procurar la felicidad del otro más allá del egoísmo y el altruismo.

Pero este proceso no se dio de golpe: el "espacio encantado" que autoriza el abandono de uno mismo y el reconocimiento desinteresado del otro, obedece a un estímulo históricamente nutrido y basado en una necesidad antropológica: ante la evidencia de los múltiples espacios de conflicto simbólico, es necesario suponer un espacio donde el sujeto pueda entregarse libremente -sin temor a perderse- en un nuevo nacimiento donde el otro ha cedido su poder.

Hay entonces una justificación de existir y una razón de ser: la confianza de una comunión simbólica indisociable cápaz de rivalizar con otras instituciones sociales. En las sociedades modernas entonces, y ante la pérdida del concepto Dios, el amor no es sino su sustituto mundano.

El amor me parece con mucho el instrumento de opresión social más insidioso y más eficaz.
R W F

Con Berlín Alexanderplatz, Fassbinder -como Döblin- abre 2 lecturas: si bien el segundo reconstruía el auge del fascismo durante la crisis del 29 y su progresiva penetración en la opinión pública, el primero la integra su propia obra -como muestra su epílogo - y la novela aparece como un espacio que lo refleja y contiene. Dos ejemplos:
  • No es extraño entonces que él mismo aparezca como el personaje llamado FBiberkopf en "La ley del más fuerte" o el rumor de un proyecto de hacer una segunda versión con él mismo como Reinhold, Gerard Depardieu como Biberkopf e Isabell Adjani como Mieze.


  • La homosexualidad latente de los personajes, donde de ser meros antagonistas, entran en un doppelgänger que simboliza los polos antagonistas de una misma personalidad -dando todavía mayor complejidad a la novela-.



Por otro lado, Berlín Alexanderplatz es eso: una historia de amor.



Al final, tras haber perdido a la mujer que amaba, vemos a un FBiberkopf roto, acabado...

Si el amor es más frío que la muerte es porque la soledad del enamorado es mucho mayor que la del moribundo, porque su amor implica a otro ser y éste no le corresponde, y también porque las personas que rodean al moribundo comparten su sufrimiento, pero las que rodean al enamorado lo abandonan a su suerte, no sin cierto placer malsano.

Y tras darse por vencido, tras la crucifixión viene la resurrección: cuando se cierra el ciclo de vida del personaje, éste regresa a la casilla de salida: todo ese camino para nada, sólo que la vida resulta más fuerte que la muerte y le es concedido un nuevo plazo -empezar por 3ª vez, más desnudo, mas despojado "No se murió, pero no es el mismo, está averiado..." pero también más fortalecido por las pruebas vividas, redimido por ellas.

El personaje se da por vencido, termina por aceptar su soledad en el espacio desierto de un garaje olvidado; el desempleado apolítico que vendía propaganda nacionalsocialista sin interesarse en ella es ahora testigo del hundimiento de la sociedad en baños fascistas. La soledad de Biberkopf es la soledad del último ser humano.



Ya para ir cerrando, dejo una entrevista a Fassbinder:



Y otra más:



Pero bueno, tampoco todo tiene que ser tan pesimista, así que dejo una carta que el Pituco tuvo a bien hacer pública:

Hola Pituco !, soy Antony Hegarty, si el de los Johnsons... como me entere que por acá dicen que soy un "Marica Triste" vine a demostrarte que no es tan aí, en esta banda desplego toda mi alegría, en algunos lugares vi que nos etiquetaron como música electrónica, ... pero lo nuestro es el disco de los 70´s, mucho ritmo, muchos caños y te puedo asegurar que con el tema "Blind" no vas a poder dejar de mover la patita... yo te diría que vayas corriendo las mesas del bar, porque no vas a poder parar de bailar.

Y bueno, ese disco no me desagrada pero prefiero esta canción donde -creo- el Antony sigue escuchándose MUY optimista:



Saludos y, como finaliza otra películota -pero esta de Gus Van Sant- luego de que nos deja sintiéndonos del carajo: "Have a nice day"...




Bibliografía.
Yann lardeu. Rainer Werner Fasbinder. Cátedra. signo e imagen/cineastas
Pierre Bourdieu. La dominación simbólica. Anagrama




Preciosa ilustración de Fassbinder
a cargo del maestrote Sebastian Krüger.

miércoles, 17 de agosto de 2011

24.- Berlín Alexanderplatz. A Döblin.

La crítica ha elogiado en parte el libro, en parte lo ha elogiado a medias, y en parte no lo ha elogiado y lo ha denostado furiosamente. Todos tienen razón. En especial, ruego a los que han denostado el libro y lo siguen denostando que me acojan en su corazón, porque lo merezco (tanto el ser denostado como el ser acogido).
Alfred Döblin

Las primeras 200 páginas me aburrieron tan soberanamente que a punto estuve de dejar el libro a un lado, sin terminarlo... Pero con ello no sólo me habría perdido uno de los contactos más estimulantes y cautivadores con una obra arte, sino que -y creo que sé lo que digo- incluso mi propia vida, si no en su totalidad al menos en parte y una parte esencial, se habría desarrollado de manera diferente -podeís tomároslo a broma- a como se desarrolló con la novela Berlín Alexanderplatz, en la cabeza, en la carne, en el cuerpo, en el alma...

En la segunda lectura descubrí, al hilo de las páginas, primero con sorpresa, luego con angustia y por último con una turbación tan grande que tuve que cerrar los ojos y taparme los oídos, es decir, reprimirme, que una parte enorme de mí mismo, de mis comportamientos, de mis reacciones, que mucho de lo que yo creía que era yo mismo no era otra cosa que lo que Döblin describe en Berlín Alexanderplatz. De manera inconsciente había convertido lo imaginario de Döblin en mi vida.
Rainer Werner Fassbinder

¿Amor? ¿Qué es eso? Es la cura más natural que existe. AMOR.
William Seward Burroughs


Esto se está volviendo una joyería cualquiera. Pero vamos a dejar descansar a Philip K. Dick y Stanislaw Lem -en lo que junto más material- y, antes de poner más material de clase, vamos a hablar de una novela E N O R M E:

B E R L Í N
A L E X A N D E R P L A T Z.

La historia de Franz Biberkopf.


Y como aquí no se escatiman recursos -siempre y cuando sean gratuitos-, imaginemos una historia en esta ciudad en 1925:



Y apelando a la imaginación, sumemos el ambiente de por lo menos una de las habituales preciosidades de George Grosz:













George Grosz. "Dusk" de "Ecce homo", 1922

Döblin es de esos escritores alemanes críticos -Bretch, Jünger por ejemplo- al que -por ejemplo- si bien alguien como WBenjamin le criticaba el proporcionarle a la burguesía elementos revolucionarios, también lo reconocía como el más avanzado -y último- de los escalones del Bildungsroman.

Olvidado en vida, Döblin no estaba bien situado, no caía bien. Para la izquierda progresista era demasiado católico, para los católicos demasiado anarquista; para los moralistas le faltaba firmeza en sus tesis, para la radiodifusión didáctica era demasiado vulgar... El mundo de Döblin no se cotizaba ni se cotiza.
Günter Grass

Como médico, estuvo en permanente contacto con diversos delincuentes que marcan su visión de la vida: que no existen fronteras claras entre éstos y los "no delincuentes" y que, en todos sus puntos imaginables, la sociedad está socavada por la delincuencia.

Berlín Alexanderplatz es la única novela que he leído de él. No sé si se han traducido otras pero esta es -tengo entendido- su obra más importante. ¿De qué trata? Döblin explica:

En Berlín Alexanderplatz Franz Biberkopf sale de la cárcel, es bueno por naturaleza, y además es un gato escaldado que huye del agua fría. Y cuando va al mundo, ya veís, quiere ser honrado, quiere cumplir honrada y fielmente las leyes de este mundo tal como él se las imagina... ¡Y-no-es-posible! No es posible. Fuera nada había cambiado y él seguía siendo quien era. ¿Cómo podía producirse un nuevo resultado? Sólo si uno de los dos resultaba destruido, Berlín o Franz Biberkopf. Y como Berlín seguía siendo el que era... Los golpes se suceden y acaban con ese hombre.

Franz Biberkopf quería lo "bueno", pero ¿Qué era eso más que una palabra? Yo lo someto a una carrera de baquetas, las desgracias se suceden: va a la caza de lo bueno, una caza con ojos cerrados, pero monta en un caballo que galopa ¿Cuándo se partirán el cuello los dos, corcel y jinete? Al final parecen haberse roto el cuello. Pero cuando Franz acaba en el manicomio, algo ha cambiado sin embargo en él. El sacrificio se ha consumado silenciosamente. Como se dice al final, ahí está, como portero de fábrica, vivo aunque averiado, la vida lo ha zarandeado poderosamente.

Contemplar y escuchar todo esto será útil para muchos que, como Franz Biberkopf, viven dentro de una piel humana, y a los que les pasa lo que a Franz Biberkopf: que esperan de la vida algo más que un pedazo de pan.



Tiene razón Fassbinder con que el inicio es bastante pesado pero, también coincido, poco a poco, empieza a leerse una mezcla de recursos bastante sabrosa donde la ciudad es un personaje central:

  • Las citas bíblicas
Y volví el rostro y vi todas las injusticias que hay bajo la capa del cielo, y he aquí que había lágrimas en los que padecían injusticia sin que nadie los consolara, y los que cometían la injusticia eran demasiado poderosos. Y alabé a los muertos porque habían muerto ya.
Eclesiastés 4. 12
  • La burla, desde la medicina, a la propuesta Freudiana.
En una semana estaría de pie con su ayuda. Dios, que grandes curanderos son ustedes, alabada sea la nueva terapia, envíenle un telegrama de homenaje a Freud en Viena, y una semana después el muchacho estará paseándose con su ayuda por el pasillo, milagro, milagro, aleluya; una semana más y se conocerá de memoria el patio, y en otra semana con su benévola ayuda se habrá largado, aleluya, apaga y vámonos.


Y la referencia constante a la forma en que las políticas fascistas se encargan de agredir al distinto -judíos, homosexuales, etc.- considerándolos delincuentes por ser diferentes.


Según entiendo, Levi-Strauss proponía que las obras de arte funcionan como "modelos en miniatura" que, renunciando a alguna dimensión de la realidad, ganan nuevas dimensiones inteligibles que el espectador une creativamente. Así, si en lo cotidiano la totalidad se entiende a partir de la suma de las partes, en estas obras, la realidad queda superada a partir de diferentes niveles produciéndose con esto una inversión al proceso tradicional del conocimiento. Creo que esto pasa con este trabajo.


Obviamente, esta mezcla hace más o menos claras sus influencias:
  • Manhattan transfer -1925- maravilla de la racionalidad y la cabecita de John Dos Passos, y el Ulises -1922- de Joyce. De más está cualquier comentario sobre éstos trabajos; lo que si creo es que BAlexanderplatz tiene la ventaja de ser mucho más emotiva, y -creo- con cierto sentido del humor.
  • los manas, poemas épicos de la India donde el héroe se queja de su destino y se precipita al reino de los muertos para vivir una nueva vida. Y aquí Döblin señala la necesidad de trivializar dichas tragedias a partir de un personaje más cercano al delincuente que al obrero.
  • La propuesta futurista, el humor dadaista y, sobre todo, la estética expresionista, que parte de una distorsión deliberada de la realidad y donde la naturaleza adquiere un carácter más espontáneo y experimental. Ahí van unos ejemplos:

Todos tienen el mismo aliento, y el hombre no más que el animal
Eclesiastés. 3, 19

  • La descripción "gratuita" de una matanza de cerdos en un rastro cualquiera como metáfora de la aplicación de la Justicia y el Orden:

Muy blandos y blancos, muy satisfechos después de un baño cansado... los cerdos yacen en filas sobre bancos, tablas... todos están echados de lado, a algunos se les ve la doble fila de tetillas, cuántas tetas tiene una cerda, deben ser animales fecundos. Pero todos tienen aquí un tajo rojo y derecho en el cuello, exactamente en su parte central, es muy sospechoso.

Ahora suenan golpes secos... Un hombre joven de cara pálida, con el cabello rubio y aplastado, tiene un cigarro en la boca. ¡Miradlo, es el último hombre que se ocupará de vosotros! No penseís mal de él sólo cumple su obligación... El hombre va de un lado a otro con la vista baja, buscando, buscando. Se trata de pesquisas sobre cierta persona implicada en el caso x contra y y ¡Zas! Uno ha salido corriendo entre sus pies, ¡Zas! otro más. El hombre es rápido... el hacha ha caído silbando, se ha hundido en la aglomeración, golpeando una cabeza, otra cabeza más... Algo patalea en el suelo. Algo se agita. Se mueve de un lado a otro. Ya no sabe nada. Y se queda allí. Qué hacen las patas, la cabeza. Pero eso no lo hace el cerdo, lo hacen las patas por su cuenta.


  • Franz Biberkopf camina sin pensar luego de saber que la única chava que lo quería ya fue:
Hacia la noche FBiberkopf está otra vez en movimiento. 5 gorriones vuelan sobre él. Son 5 malvados asesinados que han encontrado ya otras veces a FBiberkopf. Están considerando lo que pueden hacer con él, lo que deben decidir, cómo infundirle miedo e inseguridad, con que obstáculo lo harán tropezar.

Los 5 criminales, los gorriones están otra vez con él, posados arriba en un poste del telégrafo y gritándole desde lo alto: Vete a verla granuja ¿Te atreves, no te avergüenzas de ir allí? Vete a verla al cementerio.


  • Otra vez, deambulando:
Por qué caminan dos ángeles junto a Franz, qué clase de niñería es ésta, desde cuándo caminan los ángeles junto a las personas, dos ángeles en la Alexanderplatz de Berlín, en 1928, junto a un ex homicida y ahora ladrón rufián... Se aproxima el momento en que todo se aclarará.


  • Y la mejor, la crisis en pleno: FBiberkopf se encuentra con la segadora. Susan Sontag la pone como una de las descripciones más descarnadas de la literatura.
-Pero ¿Qué he hecho yo? ¿Es que no me he atormentado bastante? No conozco a nadie a quien haya pasado lo que a mi, cosas tan lastimosas, tan lamentables.

- Tu nunca estabas allí, so mierda. No he visto en mi vida a FBiberkopf. Te digo que no abriste los ojos ¡Perro sarnoso! Maldices a los granujas y sus granujerías y no eres capaz de mirar a la gente y preguntarte por qué ni cómo. Qué clase de juez eres para juzgar a las personas si no tienes ojos. Has estado ciego y has sido descarado además, petulante, el señor Biberkopf del barrio distinguido, y el mundo tiene que ser como él quiere. Pero es diferente muchacho, y ahora te das cuenta.

-Has perdido la guerra jovenzuelo. Hijo mío, has terminado. Ya puedes liar el petate. Que te pongan naftalina. Te he borrado de mi lista... No tienes cabeza, no tienes oídos. No has nacido. Hombre, no has venido al mundo. Eres un aborto con alucinaciones... El mundo necesita a otros tipos que no sean como tú, más inteligentes y menos insolentes, que vea como son las cosas, no de azúcar, sino de azúcar y mierda, todo mezclado. Bueno muchacho, dame tu corazón para que acabe contigo. Para que lo tire a la basura, que es donde debe estar. Los morros te los puedes guardar.


Una de las cosas que más me gustaron de la novela es su estilo. Insisto, a diferencia de Joyce o Dos Passos, Döblin carga de emotividad su trabajo sin caer -creo- en consignas izquierdistas con lo que hace evidente una distancia: no se trata de reconocerse con una clase social sino con el individuo, aún a sabiendas de que éste esté destinado al fracaso. Creo que si bien hay mucha carga social en el trabajo, la carga humanista se centra en el personaje: su necesidad de creer y su rechazo a la vida ante la inútil de volver a encontrar el amor.

Hemos llegado al final de la historia. Ha sido larga, pero tenía que prolongarse y prolongarse hasta llegar a ese punto culminante que lo ilumina todo.
Hemos caminado por una oscura avenida... Franz Biberkopf no ha recorrido esa calle como nosotros. Se precipitó en ella, en esa calle oscura tropezó con los árboles; cuanto más corría con más árboles tropezaba...

Finalmente es portero auxiliar en una fábrica de mediano tamaño. ya no está solo en la Alexanderplatz. Hay algunos a su derecha y algunos a su izquierda, y delante de él van algunos y detrás de él van algunos.
Muchas desgracias ocurren cuando se va solo. Cuando hay varios las cosas son distintas. Hay que acostumbrarse a escuchar a los otros, porque lo dicen los otros me importa también. Así me doy cuenta de quién soy yo y de lo que puedo proponerme. Por todas partes a mi alrededor se libra mi batalla, tengo que estar atento porque antes de que me dé cuenta me tocará a mí....

¿Qué es entonces el destino? Solo, es más fuerte que yo. Si somos dos, ya es más ser más fuerte que yo. Si somos diez, más difícil aún. Y si somos mil o un millón, ya es dificilísimo. Pero también es más bonito y es mejor estar con otros... Duerme tranquila, Patria querida, que yo no duermo ni cosa parecida.
Hay que estar despierto, hay que estar despierto, pasan cosas en el mundo. El mundo no está hecho de azúcar. Si tiran bombas asfixiantes tendré que asfixiarme, no se sabrá por qué las han tirado, pero eso no importa, hubo tiempo para ocuparse de ello.

Si hay una guerra y me llevan a ella, y no sé por qué y me han llevado, y la guerra ha empezado sin mí, tendré yo la culpa y me estará bien empleado. Hay que estar despierto, hay que estar alerta, no está uno solo. En el aire puede granizar y llover, contra eso no se puede hacer nada, pero contra muchas otras cosas sí se puede hacer. Ya no gritaré como antes: el Destino, el Destino. No hay que venerarlo como si fuera El Destino, hay que mirarlo a la cara, agarrarlo y destrozarlo.


Al mismo tiempo, este trabajo sirvió de referencia de, al menos, 2 trabajos que podrían seguir a esta entrada:
  • Berlín Alexanderplatz. de Fassbinder y que, como dice la introducción de la novela: "Quien se sienta fascinado por el cine de Fassbinder se inclinará ante esta película, que es probablemente su obra maestra. Quien lo aborrezca visceralmente encontrará confirmados sus peores prejuicios".
  • "La región más transparente" de Carlos Fuentes. Según él, BAlexanderplatz fue una de sus influencias; según otros, "La región..." es una de las novelas mexicanas más importantes. Según yo, no es lo que dicen, una cosa es el humanismo matizado desde el expresionismo y otra esa literatura pa´ fodongas que "pomposamente" se le llama "realismo mágico"; en fin...

Y bueno, ya para cerrar, y como estilo obliga...



Saludos...

Alfred Döblin. Berlín Alexanderplatz. Ed Cátedra -cuya pasta blanda queda compensada con una introducción tan completa-...


miércoles, 10 de agosto de 2011

23.- 4º Regalo. Gaspar Noé

It is as black as Malevitch square
The cold furnace in wich we stare
A high pitch on a future scale It is a starlesswinternight´s tale.
It is that black I wish this would be your color, your color I wish
Einstürzende Neubauten. "Sabrina"


Luego de la amable visita de Norman McLaren por acá, justo es contrastar con el trabajo de alguien del que sólo queda una duda: ¿Puede existir quién no lo ame? Y la respuesta sigue siendo la misma...













Y, nuevamente, música pa´l invitado: directito del que, creo, es su trabajo más reciente...



Luego de revisar algunas entrevistas, creo que podría destacar que la influencia de los monstruos básicos Peckinpah, Kubrick, Pasolini, Fassbinder o Buñuel, sirve para evidenciar no sólo la necesidad de superar el lenguaje tradicional del cine-casi-TV (que se reduce a hacer close ups a actores que a su vez se limitan a leer diálogos), sino como respuesta ante la limitada visión de aquellos que, sintiéndose agredidos cuando presencian un trabajo diferente a su propia visión, sólo responden con un "si hacen -o consumen- trabajos sobre violencia, gays o incesto, seguro, en su enfermedad, están a favor de la violencia o la homosexualidad"...

Y como muestra: la historia de un carnicero pobre de los suburbios de Paris víctima de su propio destino; ubicada en una Francia que no necesariamente es Francia, puede ser Sarajevo, Brasil o México. Si la moralidad más anodina promueve hipócritamente no agredir más que al diferente más débil ¿Por qué no un trabajo que agrede TODO en su conjunto -y con una fotografía formalmente impecable-?. Para chuparse los dedos, pero sólo un ratito porque sólo es el inicio, ni modo...



Sobre este trabajo, inspirado en lo literario por Papillon (yo suponía que en "Memorias del subsuelo" pero ¿Quién sabrá más? ¿GNoé que la hizo o yo que la ví?) y en lo visual por un personaje de Harvey Keitel, destacan además, en una entrevista hecha ni más ni menos que por alguien del talento del Miguel Ángel Martín:
  • Sobre los recursos narrativos, el uso de la voz en off:
Esa fue una elección personal, porque me gusta la voz en off en las películas. Pero no la narrativa que conjuga los verbos en pasado porque es muy literario, pero una voz off en el presente, una voz que trata de reproducir el sistema mental un personaje, es muy eficaz.

Hay cierta intensidad sonora en esos sonidos tan fuertes en los cortes, que te despiertan y te crean un estado de estrés parecido al del carnicero.

Carne la filmé en el 91 y la situé en el 79 para darle un lado medio démodé. En los personajes por ejemplo Un lumpen, que en 1979 se viste como en 1970. Como si gente de 50 años en los ochenta, se viste como lo hacía de joven en los años 60. Todo tiene una estética setentista aunque fue filmada en los 90.

  • Y, como próximos proyectos, la adaptación de "Historia del ojo" de Georges Bataille (¿quién si no? Habrá que esperar que no sea tanto como "La metamorfosis" prometida de Croneneberg) y una película pornográfica.

Y bueno, también vale la pena destacar otros trabajos:




Uy:



O también:




Aquí una entrevista sobre "Enter the void"





Aquí los créditos de los que están hablando:



Y, para no hacer el cuento más largo, el corto que dio pie a
"Solo contra todos": CARNE







Saludos...

miércoles, 3 de agosto de 2011

22.- 3er paréntesis. Jan Mukarovský


Sigo también con la idea de Hal Foster de que, para acercarse a la estética contemporánea, es necesario revisar al menos 3 de las teorías más representativas del siglo XX y contrastar dicho periodo con la teoría posmoderna. Otra vez, esto no es sino un acercamiento -muy limitado a los temas, pero acercamiento al fin-.
Dichas corrientes serían:Enlace
En este caso, conviene distinguir, obviamente, la semiótica de la semiología. La primera como referencia a la escuela americana -con Peirce a la cabeza- y su corriente pragmatista y de la que uno de sus aportes más claros a la estética resulta la idea de entender los 3 niveles semánticos implicados en todo signo, es decir su calidad icónica, indicial y simbólica. En lo personal este modelo me resulta un tanto "innecesariamente denso" y muchas veces no termina de dejarme claro si es necesaria tanta complejidad para llegar a las mismas conclusiones de otros métodos. Así que, prefiero trabajar la escuela semiológica, en mi opinión más sencilla y con aportes también bastante sólidos.

Más allá de los puntos en común y las diferencias con otros estructuralismos -por ejemplo, el de tipo económico- el lingüístico presenta -como es de suponer- al lenguaje como el valor central a partir del cual entender nuestro entorno, como un sistema dinámico desde el cual entender desde una comunicación directa hasta procesos sociales más complejos como, obviamente, el campo de la estética.

Ya se sabe, al aporte inicial de Saussure con su distinción del lenguaje en lengua y habla, los valores de los signos lingüísticos -diádico, arbitrario y lineal-, su mutabilidad e inmutabilidad, su valor sintagmático y paradigmático,etc., es necesario sumar el trabajo de distintos autores de entre los que destaca Roland Barthes, quien llevó estos planteamientos a la crítica cultural y que en la estética ejemplifica con un texto clásico: la muerte del autor.

Según entiendo, Barthes -como Levi-Strauss, Foucault o Derrida- pertenecieron a esa corriente de autores que, si bien parten de Saussure con la intención de desarrollar el lenguaje como modelo central de análisis, terminan por reconocer que ningún método -marxismo, psicoanálisis, etc.- puede englobar a la realidad: todos son necesariamente incompletos. Esto es lo que -creo- marca el paso al post-estructuralismo que después se empata con corrientes como la de la posmodernidad. No es casual que el mismo Barthes, en un trabajo tardío como es "La cámara lúcida" deje un poco en segundo plano el análisis estructuralista y se oriente más a la fenomenología-.

Como ejemplo de lo poco divertidas que resultan -a cualquier hora del día y en cualquier lugar- la semiología y la semiótica, dejo estos 2 videos de unos venezolanos explicándonos qué es la semiótica. Me pareció de lo más rescatable que encontré entre los videos del tema así que...



Segunda parte



Pero, y otra vez en el campo de la estética, destaca también una corriente más formalista y, en específico, el trabajo de Jan Mukařovský quien formó parte del Circulo de Praga y tuvo contacto con la propuesta de Roman Jakobson, de quien partió para desarrollar su propia teoría. Así, si el modelo de Jakobson propone, para una comunicación efectiva, 6 funciones, Mukarovsky reconoce en todo signo comunicativo una posibilidad estética que, por lo mismo, obliga a revisar contextos volviéndose un contrapeso a partir del cual confrontar grupos sociales y dejar de lado la idea del arte como mero acto individual. Con esto, cualquier objeto o actividad -un acto político por ejemplo- puede ser entendido desde la estética.

Para Mukarovsky, los signos estéticos proyectan una realidad en la cual el receptor puede o no reconocerse -ya sea en un sentido inmediato o simbólico- cuestionando así ideas como la de una naturaleza inamovible en el signo estético, una personalidad del artista o un contexto definitivo. Se abre así un carácter dinámico en las obras, mismas que reflejan los valores y normas sociales y plantean su propio modo de entenderla a partir de 2 momentos clave:
  • El del objeto creado. Cuyo carácter múltiple obedece no sólo a un contexto histórico , sino a una construcción de códigos planeada por el autor y donde cada elemento -y su modificación- resulta significativa.
  • La actividad. Determinada no sólo por quien construye la obra, sino por el proceso de recepción dando paso a una comunicación permanente.
Con lo anterior, hay quien señala que, al centrar su propuesta en el lenguaje, la semiología hace evidente la necesidad del dialogo como vía de desarrollo.

Creo que, y para ir cerrando, un ejemplo de lo contrario -cierta negación del dialogo- sería aquel donde precisamente quien entiende insoportable a su entorno -en este caso, la familia- decide cancelarse a sí mismo con todo y la consecuencia obvia: el único que sale perdiendo es él mismo...



Como el ejemplo estuvo un poquitín indie, y pa´ no desentonar, dejamos a la Julie Dorion:



Pero también creo que el James Murphy tiene razón: "el indie es tan limitado"... así que pa´ completar...



Saludos...